¿Alguna vez te ha pasado que llegas a una zona nueva y sientes ansiedad? O te preguntas ¿Cómo la pasaré, será como lo espero? Incluso ¿Cómo llegue aquí? … así empezó la aventura en Cojitambo, Ecuador.
Tenía varios días pendientes de vacaciones y lo mejor que puedes hacer con eso es aprovechar y meterte un buen viaje, fue justamente lo que hice. Me fui de viaje con Francisco “Panchito” unos días por el norte escapando del invierno de Lima y luego a Ecuador, que fue siempre el plan principal, aprovechar esos días e ir a escalar lo más que podíamos.
Llegamos a Ecuador Cojitambo un martes luego de 8 horas en bus de Máncora – Cuenca, 1 hora Cuenca – Azogues y 30 min Azoguez – Cojitambo; en cuanto bajamos del bus vimos la pared imponente y lo primero que pensé fue, ¿quién nos sugirió este sitio tan increíble?… no recuerdo ese detalle pero GRACIAS!
A pesar de tener como 10 años escalando… asuuuu jajaja, los multi largos los descubrí hace poco y quede fascinada, Cojitambo es un buen sitio para practicarlo y/o como dirían algunos, para “graduarse”.
Nos quedamos en la casa de un escalador, Juan Gabriel, muy amable y quien nos daba todos los tips para disfrutar de la zona. Desde el 1er día escalamos y sabíamos lo que queríamos hacer si o si, eso gracias a las recomendaciones de quienes habían ido antes, solo debíamos revisar tiempos e ir definiendo que hacer cada uno de los 6 días que estaríamos ahí.
El 1er día nos fuimos al Sector “VIP” y “Revolcón” a probar unas cosas fáciles para ir acostumbrándonos y sentir la roca, una roca increíble ya que no te maltrata las manos, eso nos permitió probar todo lo que quisimos. Ese 1er día probamos una ruta de 2 largos muy fácil para ir tomando confianza. El 2do día subimos un poco más el nivel y nos fuimos al sector “Lagrima de Tierra” ahí escalamos “Maniqiure Sangriento” y “Llaves pal cielo”, un total de 4 largos, luego de eso dijimos, ya estamos preparados para uno de nuestros objetivos, LA LANGAROTA, ruta de 8 largos con un total de 220 metros.
Día 3, fuimos a “La Langarota” y empezamos un poco ansiosos, no saben cómo sufrí en el primer largo, después de 1 hora estábamos los 2 en la reunión y el pensamiento fue, ¡nica la hacemos jajaja” es más Panchito lo dijo mientras yo escalaba, pero ¡lo logramos! De los 8 largos mi favorito fue el 2do, era una plaquita muy técnica con agarres finos que me funcionan muy bien… fueron en total 5 horas 45min hasta puedo decirles que primerie!!! Aquí la foto de la cumbre
Eso no acabo ahí, el día 4to seguimos probando otras rutas más tranqui para llegar descansados al día 5 y lograr nuestro objetivo # 2 – QUE CHUCHA ME VES, ruta de 3 largos pero súper aérea donde el viento y el público espectador le dan un plus adicional a la escalada. El 5to día fuimos a escalar “Que chucha me vez” para llegar al inicio debimos subir “Vamo hacele” , hasta ahí todo tranqui igual que el 1er largo de “que chucha me ves” pero el 2do largo era todo una aventura podía ver a Panchito en unos ajustes pero la encadenó, es más, me iba contando poco a poco lo que me encontraría en el camino, claro que no es lo mismo que alguien te diga algo a que lo pruebes, era mi turno y me sentía un poco nerviosa por las cosas que me habían contado y las sensaciones que tendría y déjenme decirles que es una de las situaciones en la que más miedo he sentido en mi vida jajaja.
Este 2do largo es una placa linda, con una ligera inclinación positiva y a la derecha te encuentras con una arista SUPER aérea en donde tienes que poner los pies en varios momentos de la ruta para poder seguir, además tiene unos agarres finos en varios tramos. A todo ello debes sumarle los espectadores, que llegan al mirador y a quienes escuchas como si los tuvieras a tu lado comentando cosas como “están escalando”, “míralos” o incluso “se va a caeeeer”. Esto último lo dijeron mientras escalaba y en la parte de más ajuste, en ese momento solo pensé “que chucha me ves!”, la verdad un buen nombre para la vía. Al final todo salió bien y terminamos la ruta.
Si no me crees lo de los espectadores, míralo con tus propios ojos
Nuestro día 6 también fue aprovechado y escalamos lo que pudimos.
Estoy feliz de haber hecho este viaje y probar estas vías tan increíbles, me fui feliz de la zona y queriendo regresar a Ecuador para visitar otros lugares de los cuales nos hablaron. Gracias a Panchito que me acompaño en este viaje, por la presión para subir en ciertos momentos y por empujarme a ir de primera cuando sabía que podía, también a JuanGa! un tipazo que mantiene la zona y ayuda a todos los escaladores que van con los mejores tips.
Si pueden darse una vuelta por la zona, les digo vayan! No se arrepentirán. Solo me queda decir ME GRADUEEEE
Laura Soplin
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